El aeropuerto de Alicante-Elche retoma su proyecto de desdoblamiento de la rodadura interna de la plataforma. La obra, adjudicada en 2019 pero posteriormente cancelada, se ha reactivado tras el informe de impacto ambiental, requisito previo para la nueva licitación.
Las obras, con un presupuesto de 17,5 millones de euros (3,2 millones más que en 2019), se han licitado con un plazo de ejecución de 27 meses para no interferir con la operativa del aeropuerto.
El proyecto incluye la pavimentación de la superficie ampliada para la calle de rodaje, la adecuación del sistema de drenaje y la instalación de balizamiento y nuevas torres de iluminación.
El objetivo de proyecto, tal como se indica literalmente en el informe ambiental, es "la ampliación de la plataforma frente a la nueva área terminal (NAT) del aeropuerto para [...] resolver el problema de congestión que se da cuando se produce la circulación simultánea de aeronaves en sentido de entrada y salida a la plataforma". De esta manera, "se pretende disminuir el tiempo de ocupación de la pista e incrementar los márgenes de seguridad y de calidad en las operaciones y servicios prestados en las instalaciones del aeropuerto".
AENA destaca que esta obra, junto con la próxima licitación para la redacción del proyecto de ampliación de la terminal, dotará al aeropuerto de la capacidad necesaria para atender la demanda de tráfico de los próximos años, que podría alcanzar un máximo de 26 millones de pasajeros (la capacidad actual es de 19 millones), según el Ministro de Transportes, Óscar Puente.
Estas actuaciones están contempladas en el plan DORA 2022-2026 (Documento de Regulación Aeroportuaria), que fija 2026 como el horizonte para disponer de esta ampliación operativa, una demanda de las aerolíneas del aeropuerto desde hace años.
La posible construcción de una segunda pista, que podría ubicarse al norte del aeropuerto cerca del nuevo desdoblamiento, se evaluará en el DORA 2027-2031, cuya publicación está pendiente por parte de AENA.
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